Anoche los españoles, y unos tropecientosmil eurovisionístas, pudieron ver algo que hasta ahora era habitual en los espectáculos taurinos y futboleros. En este último caso, el espontáneo suele salir desprovisto de vestiduras o en pelota picá.
Por fortuna, o por desgracia -vaya usted a saber- el espontáneo se coló luciendo gorro frigio y una camiseta negra con inscripción en blanco; poseído por la melodía del 'algo pequeñito' y observado por todos los que había frente al televisor, los seguratas noruegos y el propio Diges & Cía., el señorito tuvo su protagonismo durante unos segundos muy largos. Eso sí, paso de decir quién es porque ya se encargarán otros medios de hacerle publicidad gratuita (así nos va).
La casualidad quiso que le tocase a Diges, el español, y no a otros de los muchos cantantes que allí estaban. Entonces esto quiere decir que damos la nota allí donde vamos o... ¿será una confabulación de Karmele y el propio Cobra?
Mientras el domingo español estará dividido entre los que ven la F1 y los que comiencen a mascar variopintas conjeturas sobre el tema del espontáneo, yo me decanto por la primera opción, esperando que no se cruce uno de estos personajes por las pistas de Turquía; lo digo por lo de las banderitas amarillas, el coche de seguridad... y la escabechina.
Bueno es reconocer que Alemania se ha llevado el Primer Premio de este Eurovisión noruego gracias a una 'Lolita' germana que, con moderado desparpajo, conquistó al público con un tema musical bastante pegadizo.
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